Nueva York, 27 de diciembre de 2015
Como ya habíamos hecho otras veces, comenzaríamos la jornada con el tour gratuito de Sandemans. Para eso arrancamos bien temprano llegando, subway mediante para comenzar frente al Museo Nacional del Indio Americano. Nos comentaron que era gratuito y que valía la pena vistar, así que tomamos nota mental.
|
Museo del Indio Americano |
Luego nos digirigimos al Battery Park donde adivinamos las formas de la Estatua de la Libertad cuyas formas adivinamos bajo la bruma. Allí el guía contó las aventuras de su construcción, financiación e inauguración. La moraleja es que nada es fácil.
|
Estatua de la Libertad desde Battery Park |
De allí luego caminamos por el distrito financiero, decorado por navidad, y ahora totalmente peatonal desde que por razones de seguridad se prohibió el acceso de vehículos.
De Wall Street, llegamos la Iglesia de la Trinidad, un contraste extravagante en el corazón de las finanzas mundiales...
|
Iglesia de la Trinidad |
El cementerio aledaño merece párrafo aparte. Es tan "irreal" que, en su contexto, parece una preparado para una producción cinematográfica.
|
Tumbas junto a la Iglesia de la Trinidad |
La caminata continuaba en el memorial del 11S. El monumento me dejó helada. No lo imaginaba así. Es impactante. Por un lado es magnífico y monumental, como tomando revancha del terrorismo. Pero por otro es muy "zen" e invita a la contemplación.
|
Memorial 11S
|
La segunda parte del recorrido comenzó con la Grand Central Terminal, la magnífica estación de trenes que recuperó su antiguo esplendor no hace demasiados años.
|
Grand Central Terminal |
El cielo raso reproduciendo las constelaciones reales en el mismo lugar (aunque al parecer con algunos errores) guarda todavía una pequeña marca de la restauración. Por el efecto de décadas de humo de cigarrillos estaba completamente oculta tras capas de contaminación.
|
Cielo raso de la Estación Central |
|
Grand Central Terminal
|
Caminando por Park Avenue pasamos por el elegante Waldorf Astoria, que aún cuando ya no es el hotel lujoso y más caro de la ciudad, es el lugar donde un cheff inventó la ensalada Waldorf, un notable aporte a la humidad. En su fachada, la bandera de Italia, daba cuenta de que se encontraba alojándose algún funcionario de ese país.
|
Hotel Waldorf Astoria
|
Por la zona del Rockefeler Center la cantidad de gente era tremenda. Imposible caminar con calma. Llegando a Brodway casi no era posible hacerlo con tranquilidad. La hermosa decoración navideña y el lujo de los cristales de Swarowsky se opacaban con tanta aglomeración humana.
|
Réplica de la estrella del árbol (cristal Swarosky) |
La caminata continuó hacia la zona de Bryant Park, un hermoso parque público 100% financiado con fondos privados. Y también las las famosas torres de los Edificios Chrysler y el Empire State iluminadas.
|
Edificio Chrysler |
|
Empire State |
El recorrido finalizó en la imponente bibliotecta pública de Nueva York, que nos recordó, entre risas, el inverosímil final de "El día después de mañana".
|
Biblioteca Pública de Nueva York |
Y de allí, caminamos rumbo al hotel, agotados. Intenso primer día.